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13 de mayo de 2013

Él&Ella 118

Ella se lo dio
Él tenía el mapa
pero no lo usaba
porque no entendía
cuál era el tesoro

5 de mayo de 2013

Tan simple que te atraviesa


Lo que tenía que ser para siempre
no fue para siempre
por eso necesitas algo que poner
en el lugar donde tenía que ir
lo que tenía que ser para siempre

Tan simple que te atraviesa acuchilla hiende
y se queda dentro

1 de mayo de 2013

En una poesía


calcinaste mis planes con sólo enseñarme los dientes

desde entonces vivo contigo 
con lo que sé de ti
con lo que no sé
invento

en una poesía

30 de abril de 2013

Tú sola

A qué esperas eterna furiosa
como remando en la laguna estigia
muerta o viuda
quién te lo revelará
quién ha de revelarte algo ahora
a quién le nace esa intención
Y cómo confundes tú tus
intenciones y lo vivido y lo no
vivido
Y donde estuvo esa cara pones otra 
cara
¡Ah! La memoria siempre supo photoshopear
y maquillar
y pintar flores
y despejar los días nublados
No te fíes de tu memoria
no por mala sino por buena amiga
ha de confundirte
Quién te desconfundirá 
Quién ha de desconfundirte ahora
Tú sola

27 de abril de 2013

25 de abril de 2013

Papel


Has pensado en escribir tu número en un papel
y volárselo mientras le pones una
de esas miradas inequívocas tuyas
Has pensado en hacer del papel un avión
como Otto, como Ana
podrías contar tu vida uniendo casualidades
porque esto es una jodida casualidad

Has pensado en escribir tu número en un papel
y es todo un gesto porque ya nadie escribe
ya nadie escribe teléfonos en papel
se limitan a teclearlos guardarlos en el móvil
pero en esta escena, de haberla, debe haber papel
debe haberlo

Has pensado en escribir tu número en un papel
no lo has hecho porque no estás segura
tú ahora truncada mediorrota
y porque lo que verdaderamente te aterra
es que lo use
que tu mirada inequívoca siga siendo inequívoca
que de repente pase
que sea un ¡valiente! que salte

Has pensado en escribir tu número en un papel
y entregárselo pero lo más seguro
es que tragues 1 mg, escribas unas líneas
y relegues la acción a un futuro incierto simple
en que estés libre despoblada por dentro
que no quepa ni un rumor de este decrépito miedo

22 de abril de 2013

Ya no te escribo


Ya no te escribo porque es como tumbarte en una autopista a esperar que te pasen por encima 14 autobuses escolares o como tirar una piedra al mar y esperar que el mar te la devuelva envuelta en algas.

Ya no te escribo y si te escribiera te hablaría de algunos poemas de Roger Wolfe, de los pocos autores vivos que he leído, que tradujo a Buk y algo se le pegó; te hablaría de uno en concreto de C. Iribarren, también vivo; y de la película American Splendor con y sobre Harvey Pekar, autor del texto de aquel libro sobre los beats que tan acertadamente me regalaste.

Ya no te escribo. Ya te he escrito.

19 de abril de 2013

No es sencillo

No puedes obligar a alguien
a jugar contigo
No puedes obligarte
a jugar con alguien
Tienes que jugar con quien
quieras jugar
que quiera
jugar contigo
para arañar uno de esos
momentos de felicidad
de los que hablan
algunos libros

18 de abril de 2013

SI TODO FUERA TAN FÁCIL COMO TIRAR UNA BOLSA DE FOLIOS LLENOS DE RECUERDOS EN UN CONTENEDOR AZUL


¿Cuándo dejaré de ser
tuya?
¿Cuándo dejaré de sentirme
tuya?
¿Cuándo no habrá ninguna célula
ningún poro
ningún peloantena
ningún recodo
de mí
que tenga recuerdo
de ti?
¿Cuándo me propondré
dedicarme
seriamente
a lograr
dejar
de sentirme
tuya?

17 de abril de 2013

E.G.B.


El monstruo de las ganas le echa
un pulso al monstruo del miedo
¡Hagan sus apuestas,
   caballeros!

Silba el recuerdo
del pasado dolor
   Congela sus pies
Ruge el hambre
de un nuevo bocado
   Apeteciéndole

Ella se rascaba las imperfecciones
hasta hacerse herida
Él no paraba de tocarse el pelo
hasta arrancarse alguno

Ella leía, él escribía
Ella le miraba, él sabía que ella le miraba
Él escribía que ella le miraba
   (o eso es lo que ella quiso pensar)

Y todo lo que iba a pasar
después de ese preciso instante
era un fecundo y acojonante enigma
ante el que tenían las mismas ganas
que miedo
sentados no muy lejos
en aquella aula
de lo que algún día fue
algún grado de E.G.B.

11 de abril de 2013

Diminutivo de capricho


Ni rojas ni negras ni verdes
no tienen, 
gastaron el color
mis coléricas ganas de verle

Ahogué a mi pájaro azul
con vino blanco y ginebra
piaba el perfect day de Lou
brama profusa su herencia

Ya no los llamo genios
aunque están en las noticias, los veo
Ya no hay hocico banyat
ni sustos en Jaime III

Dormida confundo al hombre con el perro
ya lo hice en la waking life
y todos los pensamientos que les tengo
y que proyecto
flotan entre las nubes cian

Bailo bailo bailo bailo bailo
el I want you de Bob
Puede que invoque a algún astro
esta noche
puede que duerma mejor

sin razón

9 de abril de 2013

1ª persona singular presente indicativo empreñar

Sí, lo sé, estás aquí.
Sí, claro, estoy aquí.
Y es tan raro 
como conjugar 
un tú y yo 
que no sea
nosotros.

7 de abril de 2013

Delirios de rareza


Tengo la sensación de una cuenta atrás pero no sé adónde.
Tengo la sensación de una serie de elementos que forman una secuencia
que intento predecir.
Tengo delirios de rareza.
Tengo la sensación de tres funerales siempre que atravieso la misma plaza menor.
Tengo la sensación de solipsismo más firme que nunca.

Sólo rompo el silencio con el sonido de mi voz
interior.

5 de abril de 2013

Nadie más lo hará

Como aquella vez que denuncié un acoso anónimo telefónico y en la comisaría me dijeron que no harían nada, que quedaría archivado en alguna carpeta de algún cajón y si en el futuro me violaban o mataban lo usarían como pista en la investigación.

Fui yo quién resolvió el caso valiéndome de mi talento teatral y mi sangre fría, pero lo más irónico del asunto fue que aquel policía que me tomó los datos por amenazas y vejaciones acabó por convertirse en mi manifiesto nuevo acosador.

Y es por esto que uno debe encargarse de sus propios asuntos. Nadie más lo hará.

27 de marzo de 2013

Una transición de lo real a lo idílico


Fotograma de Like Crazy

Escribí

Ya
no sé
quién eres

Pero no es cierto. Sé quién eres. Sé quién eres. Lo sé. Te dije que iría con pancartas. Y, de alguna forma, lo he hecho. Hace unas semanas vi cerca de la Misericordia un accidente, los momentos posteriores a un atropello: alguien en el suelo, policía, ambulancia y un corro de personas mirando. Ya sabes que a mí no me gusta mirar. Tú hubieras mirado. Pensé ¿y si es él?. ¿Me enteraría? Ya no es un dolor que ahogue ni queme ni oprima. Es un dolor consternado, sedado, frustrado, silencioso, discreto, elegante. Hay quienes nunca conocen al amor de su vida y quienes dicen haberlo encontrado pero no poder estar con él. Hay para quienes no pasa de ser un concepto abstracto. Yo puedo decir que lo palpé con los dedos de las manos y con las frías yemas de los dedos de los pies. Que lo estrujé entre mis brazos y mis piernas y mis nalgas y mis dientes. Que lo conocí hasta desconocerlo... Tú y yo puede que ya no seamos nosotros, pero nunca seremos desconocidos. Sólo fue una transición de lo real a lo idílico. Justo al contrario que el resto del mundo.

Seguro
que en este segundo
una pulga
muerde el culo
de un cliente
del pub Yang

26 de marzo de 2013